Mi esposa Alice es una persona extremadamente honesta y confiada y no sabe rechazar a los demás. Sus vecinos suelen recomendarle que compre una cosa tras otra. Aun así, ella sigue siendo mi esposa amable y obediente. Pero parece que su docilidad todavía tiene sus límites. Cuando me fui de viaje de negocios, la dejé con mi padre, un chico muy malo. Aunque todavía confío en él porque es mi padre, sinceramente todavía estoy un poco preocupado. Y justo cuando estaba preocupado, tan pronto como me fui, empezó a atacar a mi esposa. Quería darle un masaje a mi esposa y como ella no sabía decir que no, le dejó llevar a cabo su plan. Comenzó el masaje con normalidad y luego masajeó gradualmente los lugares sensibles de Alice, incluso quitándole la ropa, lo cual ella no pudo rechazar. Con la experiencia de un chico malo combinada con el hecho de que Alice es muy crédula, en tres días, el padre pudo seducir a Alice para que le hiciera el amor una y otra vez...